El regreso de “FernanBond”

El actor Sean Connery (James Bond) y el Aston Martin DB5, protagonistas de 007 “Goldfinger” 1964. Foto: Pinterest

Aunque Max Verstappen y el Red Bull RB19 lucieron dominantes e intocables en la inauguración de la temporada 2023 de Fórmula

Uno en el circuito de Sakhir en Baréin, fueron Fernando Alonso y el Aston Martin AMR23 los que colmaron la escena con su tercer lugar en el podio, juntándose a Verstappen el ganador y su compañero Sergio Pérez en el segundo peldaño.

Finalmente, el siempre joven asturiano de 41 años de edad y 19 temporadas completadas en la categoría reina del automovilismo mundial desde 2001 (en 2002 solo fue piloto de pruebas de Renault y estuvo ausente corriendo otras categorías en 2019 y 2020), regresa a competir por los primeros lugares, después de conquistar el campeonato de pilotos en 2005 y 2006 con el rombo galo, para cambiar de un equipo a otro sin la suerte necesaria, a pesar de encontrase varias veces en monoplazas bien competitivos.

Con McLaren en 2007, se encontró con un inesperado novato extraordinario llamado Lewis Hamilton, con quien peleó en pista y fuera de ella, terminando ambos por perder el campeonato de pilotos con Kimi Raikkonen (Ferrari) por un punto y la escudería inglesa el de constructores por el tristemente famoso Spygate con Ferrari. Luego con la escudería del Cavallino Rampante , perdió la posibilidad de titularse campeón dramáticamente en la última carrera de las campañas 2010 y 2012.

Aprovechando el inesperado retiro del tetracampeón Sebastian Vettel, anunciado después del GP de Hungría pasado, Alonso (con Alpine) fue convencido por el billonario Lawrence Stroll de incorporarse al equipo Aston Martin, plantilla en franco crecimiento y desarrollo gracias a las fuertes inversiones del canadiense y su grupo de propietarios.

El peninsular, se encontró con un evolucionado monoplaza, el cual cuenta con un motor Mercedes -como el equipo de la fábrica- pero que se asemeja más a las características conceptuales del Red Bull (Sergio Pérez jocosamente lo denominó el Red Bull verde ), para comenzar a captar todas las miradas por su buen desempeño en los ensayos pretemporada y las prácticas libres de este primer GP de la temporada, culminando con la quinta posición en la parrilla de salida y finalmente un tercer lugar al terminar las 57 vueltas de la carrera, provocando más tiempo de filmación que el ganador, Max Verstappen.

Si bien, su subida al podio se debió al retiro del Ferrari SF-23 de Charles Leclerc en el cuadragésimo giro, Alonso deleitó a los espectadores con su agresivo pero certero manejo, con espectaculares adelantamientos, que incluyeron por posición a su otrora gran enemigo y compañero de equipo el heptacampeón Lewis Hamilton, a su compatriota Carlos Sainz de la escudería Ferrari y al segundo piloto de Mercedes, George Russell. También demostró, gracias a la retransmisión de sus conversaciones por radio a los estrategas de su equipo, el conocimiento y la paciencia necesaria para reaccionar de acuerdo a lo que iba sucediendo en la pista y mantener un ritmo adecuado para no degradar los neumáticos antes de completarse el programado periodo (stint) útil de los compuestos elegidos.

Adelantó, no solamente por su capacidad y talento, lo hizo porque aprovechó la oportunidad para hacerlo gracias a su premeditado mejor ritmo al momento.

De acuerdo a la analista Bernie Collins de F1.com, exjefe de estrategias de Aston Martin, tanto Sainz como Hamilton perdieron tiempo útil de carrera por paradas antes de lo previsto para evitar el Undercut (un piloto entra a pits a cambiar neumáticos y queda por delante del que lo antecede en pista porque cuando este hace luego su parada, sus tiempos de vuelta han sido más lentos por la inevitable degradación paulatina de los neumáticos), para el madrileño 3.8 segundos más que el tiempo ideal al final de la carrera y para el británico 5.3 segundos.

Se demostró, además, la paridad que tienen los Aston Martin con tanto los Ferrari como los Mercedes -al menos en la carrera de Baréin-, por supuesto aún muy lejos de Verstappen y Red Bull, el neerlandés finalizando más de medio minuto antes que el Aston Martin, tercero (0.66 segundos más rápido por vuelta), aunque “ayudado” por la ventaja de correr primero y poder mantener un ritmo adecuado minimizando la degradación de los neumáticos – en una pista altamente abrasiva- aun utilizando una estrategia de dos stints con compuestos blandos (C3) antes de uno final con duros (C1).

La primera carrera de larga zafra de 23 grandes premios, mostró adecuadamente como están los equipos al momento: muy primero Red Bull, segundo Ferrari, tercero Aston Martin y cuarto Mercedes (Leclerc tercero abandonó por falla mecánica -motor- y Stroll de Aston Martin finalizó sexto a pesar de reciente fracturas de ambas muñecas y cirugía en una de ellas, mano izquierda y dedo gordo del pie derecho, por un accidente mientras entrenaba en una bicicleta el 18 de febrero).

Ciertamente el desempeño en los diferentes tipos de circuitos, también será distinto. Mucho va a depender de la preparación o reglaje de los monoplazas en cada trazado en particular de acuerdo a sus características. Como siempre, el balance será fundamental.

En Baréin, el vehículo más lento al final de la recta principal fue el de Verstappen (30 kph menos que el más rápido: Hamilton).

formulaburgerf1@gmail.com

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