“Segundo, es el primero de los perdedores” – Ayrton Senna

Final del GP de Abu Dhabi y temporada de Fórmula Uno 2022. Max Verstappen (Red Bull RB18) 1º y Charles Leclerc (Ferrari F1-75) 2º. Foto: Zak Mauger / Motorsport Images.

Con su segundo lugar en el GP de Abu Dhabi, última carrera de la temporada 2022 de Fórmula Uno, Charles Leclerc logró el subcampeonato de pilotos al finalizar por delante de Sergio Pérez, impidiendo así, que Red Bull se convirtiera en el octavo equipo en

conquistar el campeonato de constructores con sus pilotos campeón y subcampeón. Así mismo, al terminar su compañero de Ferrari, el español Carlos Sainz, en el cuarto puesto, la escudería de Maranello aseguró el segundo lugar de los constructores por delante de Mercedes, quienes habían quedado campeones en las últimas ocho campañas, desde el inicio de la era de los motores híbridos en 2014.

Mientras tanto, Max Verstappen nunca se imaginó que lograría su segundo título consecutivo de pilotos tan fácilmente. Sobre todo, después de iniciar la septuagésima tercera temporada de Fórmula Uno con dos retiros en las primeras tres carreras, con un déficit de 46 puntos con respecto a Charles Leclerc, quien con su Ferrari F1-75 había obtenido ya 2 triunfos. El propio piloto neerlandés declararía “que iba a ser muy difícil remontar ese déficit, aun si su equipo lograba sortear los problemas iniciales de fiabilidad que lo habían llevado al abandono en las carreras de Bahrein y Australia”.

Los problemas de fiabilidad no se volvieron a presentar, mientras que el RB18 demostró ser un monoplaza rápido, estable y competitivo en cualquier escenario, llevando a un inspirado campeón a un récord de 15 victorias en una misma temporada (17 si se agregan las dos de los Sprint en Imola y Austria). Si bien, Red Bull dominó en diversos escenarios, agregando dos triunfos del mexicano Sergio Pérez, indudablemente influyó en los resultados la decreciente competitividad del equipo Ferrari, quienes entre poco desarrollo evolutivo del monoplaza, errores y mal manejo, terminaron por ganar apenas dos carreras más, en Silverstone por Carlos Sainz y en el Red Bull Ring, pero en ninguna en las siguientes 10 competencias, no solo perdiendo toda posibilidad de ser campeones de pilotos y/o de constructores, sino teniendo que luchar por el subcampeonato hasta la última carrera en Abu Dhabi.

También se le hizo más fácil este segundo campeonato al neerlandés por la poca competitividad de Mercedes, quienes por un garrafal error de concepto, desarrollaron -según las nuevas regulaciones- un W13 sin velocidad ni agarre, sufriendo más que ningún otro monoplaza de un fastidioso rebote (Porpoising) en las primeras carreras, que les llevó varios meses en sortear, logrando ser más competitivos al final de la campaña, con su primera y única victoria en la penúltima válida en Brasil, la cual consiguió, no Lewis Hamilton, sino su compañero George Russell. Para el heptacampeón, al final, sería la primera vez que en una temporada no consigue ni un triunfo ni una posición de vanguardia en la parrilla de salida (Pole), desde su debut en la máxima categoría del automovilismo mundial en 2007.

Justamente en Interlagos, donde los Mercedes finalizaron 1-2 primera vez desde 2020 en Imola), Red Bull terminaría fuera del podio, sus pilotos ni en el primero ni en el segundo lugar después de conseguirlo en 19 carreras consecutivas (récord previamente de 17, compartido por Mercedes entre 2014 y 2015 y Williams entre 1993 y 1994).

Otra prueba de la superioridad Verstappen/Red Bull fue demostrada por la capacidad de lograr en la presente campaña triunfar no saliendo de la posición de vanguardia. El piloto neerlandés ganó un récord de 9 carreras saliendo fuera de la Pole (récord previo de Hamilton con 8 en 2019) y en la historia el más ganador en una zafra saliendo desde 7 diferentes lugares de la parrilla de salida, tan atrás como desde el décimo cuarto lugar en Bélgica y el undécimo en Hungría, resultado de penalizaciones de posiciones por cambios de elementos de la Unidad de Potencia, actualmente muy restringidos.

Para el 2023 probablemente las cosas no serán tan fáciles para los actuales campeones. Mercedes ya se nota en estas últimas carreras estar en mucho mejor forma, aunque aún pueden aparecer dominantes en algún escenario (Interlagos, Brasil), mientras que en la siguiente carrera (Yas Marina, Abu Dhabi) vuelven a ser menos competitivos que Red Bull y Ferrari. Así mismo, la escudería Ferrari puede estar (a pesar de todo) satisfecha con el subcampeonato, sobre todo por superar un deprimente sexto lugar en 2020, pasando a terceros en 2021 y luchando por el campeonato en la presente temporada, enseñando que contaron con el vehículo más veloz, demostrado por sus 12 primeros lugares en la parrilla de salida. Si para el 2023 logran que sus monoplazas sean igualmente rápidos en las carreras, puedan controlar mejor la degradación de sus neumáticos (como magistralmente Leclerc en Yas Marina con una sola parada) y cometan menos errores, seguramente estarán haciéndole todo más difícil a Red Bull y al bicampeón Verstappen.

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Acerca de Bruno Burger 122 Articles
Miembro titular de la Comisión Médica de la FÍA para F1 (1995-2015).

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